domingo, 28 de junio de 2009

¿Estaremos en verano?

Uy, ¿es que estamos en verano?. Una de dos: o he perdido la concepción del tiempo, o vivo en una realidad paralela en la que los segundo, minutos, horas, días... han dejado de tener ese ritmo constante que los caracteriza. El caso es que los primeros meses del año se me pasaron algo lentos, pero después llegó abril y desde entonces y hasta hoy he tenido la sensación de que acontecimientos recientes pasaron hace medio año, y al mismo tiempo de que he pasado por los meses de mayo y junio en sólo 24 horas.

Esta mañana me he despertado por primera vez en mucho tiempo a las 10 de la mañana (yujú!!! ¡¡¡un fin de semana de sólo un día de duración después de 3 semanas sin descanso!!! --eso sí, con el pequeño incidente del despertador que me tocó los oídos -por no decir las narices- a las 7, me olvidé de dejarlo desconectado, falta de práctica -- ). Dudaba y he ido a mirar el calendario de la pared, ese mismo que a finales de junio sigue con todas las hojas bajadas y poniendo Feliz 2009 en la primera página, ejem. El caso es que al parecer, según la conjugación de los astros, la posición del sol, y que hoy es domingo... calculo que viene siendo 28 de junio ¿seguro? Por si acaso iré a comprar un periódico para asegurarme de la fecha (o mirar el periódico digital, es otra opción para la cual no tendría que matarme buscando unas moneditas antes de salir de casa).

Pues bien, si teóricamente estamos a 28 de junio, eso significaría que ya hemos entrado en la temporada de verano. Y digo teóricamente porque las variables contextuales me hacen pensar que me estoy equivocando. Bien, analicémoslas todas ellas:
  • tengo el típico ataque alérgico primaveral propio del mes de marzo,
  • por la ventana veo una mezcla de calor tropical-nubes grises-claros-luz y lluvia ocasional (y así desde hace un mes),-eso no viene siendo demasiado veraniego-
  • queda todavía y mes y medio para mis vacaciones o cambio de actividad,
  • no he pasado por exámenes que he decidido postponer,(y que generalmente marcaban el final de la temporada dura e inicio de mi verano)
  • y no sé si anochece pronto como en invierno o tarde como en verano... ya que salgo de mi despacho muchas (pero muchas) horas más tarde de lo habitual
Si lo pienso friamente puede que esas causas se puedan incluir o aglutinar en dos categorías principales: aquellas inherentes al cambio climático (las dos primeras) y las que son consecuencia de factores laborales. A lo mejor cuando juntas todo ello se crea una especie de agujero negro o puerta a otra dimensión que provoca que pierdas la noción del tiempo y te haga dudar sobre la estación en la que vives... Será eso.

Así que mientras sigo meditando sobre si es verano o no, para que no me pille el toro creo que empezaré a perfilar mis alternativas vacacionales. Iré ya haciendo las maletas pues ya se sabe, cuando llegan las vacaciones es hora de abrir otros chiringuitos "Abiertovacaciones"